21 días cuidándote después de entrenar

Tras el primer día de ejercicio te recomendamos algo ¡muy sencillo! Toma un yogurt natural sin azúcar, con semillas de chía y tu infusión favorita. No solo te ayudará a recargar energía sino también a relajarte.

Estirar después del ejercicio ¡siempre es obligatorio! Hoy, por ejemplo, dedícale mayor tiempo a estirar el tren inferior y ¡evita las agujetas!

Puede asustar un poco, pero ¡date una ducha de agua muy fría! Tras hacer deporte, una ducha de agua muy fría ayudará a nivelar temperaturas y al riego sanguíneo. ¡Atrévete!

¡Date un capricho! Al acabar el entrenamiento, no todo va a ser esfuerzo, ¿por qué no te das el lujo de tomarte hoy ese pastel que llevas deseando toda la semana?

Tampoco va a ser todo tan fácil. Hoy haz un par de series más o corre un par de kilómetros más. Después del caprichito de ayer, los 10 minutos extra de hoy ¡no son nada!

Si el yogurt y la chía no te convencían del todo, una muy buena opción tras el deporte es ingerir un plátano. Su alto contenido en triptófano y potasio te ayudarán a sentirte ¡genial!

¡Hidrátate! Y no lo hagas de ninguna otra forma que con agua. Pueden agradarte más o menos las bebidas carbonatadas, pero tras el ejercicio, ¡agua!

Aunque te apetezca no hacer nada más, cuando acabas de hacer ejercicio siempre estás más activo. Aprovecha este momento para cocinar y hacerte el tupper para el día siguiente o para hacer alguna otra tarea productiva que necesites.

¡Échate una siesta! Es cierto que puedes aprovechar el tiempo después de hacer ejercicio, pero ¿quién no merece un poco de descanso extra?

Date una ducha de agua ¡muy caliente! Al tener los poros abiertos del sudor y aprovechar para darte una ducha de agua muy caliente ayudarás a eliminar más toxinas de tu cuerpo.

¡Décimo día de entreno! Casi has llegado al ecuador de tus 21 días de hábitos saludables, por eso hoy, ¿por qué no te das un respiro? Sáltate el entreno y el post entreno, hoy relájate y ¡haz cualquier otra cosa!

Tras el deporte, ya sabes que la alimentación es muy importante. La ingesta de frutos secos como la nuez o la almendra, siempre cruda, te cargará las pilas ¡en un momento!

¡Estira siempre! Si un día te has centrado en ejercitar y estirar el tren superior, hoy, por ejemplo, céntrate más en el tren inferior, ¡lo notarás!

Durante el ejercicio sudamos mucho y deshidratamos nuestro organismo. Tras limpiar bien tu piel del sudor, una buena opción también es limpiar tu cara con aloe vera natural y, tras ella, aplicar la crema hidratante que utilices. Está bien que cuides tu cuerpo, pero ¡hazlo en todos los sentidos!

Haz ejercicios de relajación. Al acabar, deja que tu cuerpo se relaje con algún ejercicio de relajación. Túmbate en una esterilla e imagínate en la playa, tocando la arena, tumbado al sol… Notarás bajar la intensidad el ritmo de tu cuerpo.

¡Entrena con un/a amigo/a! Así, a la vez que ejercitas tu cuerpo, también fortaleces los lazos con algún amigo o amiga, ¿no te parece buen plan?

Te apetece algo dulce, pero sabes que no puedes pasarte de la raya. Con un poco de leche de soja y copos de avena puedes prepararte unas tortitas ¡deliciosas! Y si las acompañas de un par de onzas de chocolate 100% puro, ¡te encantará!

¡Medita! Tras estirar y comer algo, siéntate y haz algunos ejercicios de meditación, te ayudarán no solo a encontrar la paz interior sino también con tu alrededor.

Ve a cenar con tus amigos. Después de todos estos días habiéndote esforzado tanto, llama a tus amigos y organiza una cena, fuera o en casa, con cosas ricas, pero sin pasarte. Un rato entre amigos hace mucho más bien a tu cuerpo y mente que muchísimas otras cosas.

Ya casi has cumplido los 20 días. Aunque estés cansado, motívate y haz un poco más hoy. Solo con que hagas 20 minutos más corriendo, en la cinta o en la elíptica, notarás como la diferencia y verás ¡como vale la pena!

¡El último! Tus pulmones han estado trabajando mucho durante tus entrenamientos. Mezcla hojas de eucalipto con agua hirviendo, deja reposar durante 3 minutos y, tras ello, destapa, acércate y respira el vapor de agua. Este vapor te ayudará a limpiar tanto tus fosas nasales como tus pulmones. Respira y ¡siéntete bien!